Dichos y refranes sobre sordos, ciegos y mudos

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Autor: El café de la Historia


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Refranes y dichos de mudos, sordos y ciegos

Refranes y dichos de mudos

  • Por defender lo suyo, hasta los mudos hablan.
  • Guárdate del perro mudo y de las aguas quietas.
  • Más cuenta el mudo que el deslenguado.
  • Para hacerse oír a veces hay que cerrar la boca.
  • A la hija muda, su madre la entiende.
  • El sordo escuchó cómo el mudo dijo que el ciego vio cómo un cojo corría más rápido que un tren.
  • A mudos y ciegos hace testigos el dinero.
  • Ante la duda, la lengua muda.
  • Pablo se casó en Segovia, ciego, sordomudo y manco, cómo sería la novia, cuando engañaron a Pablo.
  • Cuando los mudos hablan, licencia tienen de Dios.
  • Besos de mudo, no le da Dios a ninguno.
  • El miedo del enfermo, mudo pone al médico.
  • Sordico de la mora, que oía los cuartos, pero no las horas.
  • En tierra de mudos, son cicerones los tartamudos.
  • Ave muda no hace agüero.
  • Cuando el dinero habla, todos son mudos.
  • Ciego, sordo y mudo: el mejor marido.
  • A clérigo mudo, todo bien le huyo.
  • Si entras en la audiencia de los reyes, entra sordo y sal mudo.
  • Al hombre mudo, todo bien le huye.
  • Siempre habla quien debiera permanecer callado o ser mudo.
  • A lo que no te agrada, haz que no oyes nada.
  • Ni barbero mudo, ni cantor sesudo.
  • En la duda, ten la lengua muda.
  • Solo un sordo testarudo, puede oír cantar a un mudo.
  • Habló el mudo y dijo lo que pudo.
  • El hombre que desee estar tranquilo ha de ser sordo, ciego y mudo.
  • Cuando habla el oro, todo hombre es mudo.
  • A clérigo mudo, húyele el bien que tiene por seguro.
  • Si el cuco canta durante veinte semanas, mudo estará por San Pedro.
  • Si nace mudo, revienta.
  • Mi dinero mudo, ¿Quién me lo hizo bocudo?
  • La madre del mudo entiende al mudo.
  • Estar como el niño de Diego, que nació sordo, mudo y ciego.
  • Un mudo estaba cantando, y un sordo le estaba oyendo, y un ciego estaba mirando, y un cojo pasó corriendo.
  • En caso de duda, ten la lengua muda.
  • Con más señas que mudo jugando al truco.
  • Mirar sin ver, es como oír sin escuchar.
  • El libro es un mudo que habla, un sordo que responde, un ciego que guía y un muerto que vive.

Refranes y dichos de sordos

  • El libro es un mudo que habla, un sordo que responde, un ciego que guía y un muerto que vive.
  • A palabras necias oídos sordos.
  • No hay peor sordo que el que no quiere oír.
  • Los sordos de conveniencia, que de lo que no quieren, no se enteran.
  • Solo un sordo testarudo, puede oír cantar a un mudo.
  • A lo que no tiene remedio, oídos sordos.
  • El hombre que desee estar tranquilo ha de ser sordo, ciego y mudo.
  • Perfumes al catarro, bálsamo al pasmo, luz al ciego y ruiseñor al sordo, aprovechan poco.
  • Un mudo estaba cantando, y un sordo le estaba oyendo, y un ciego estaba mirando, y un cojo pasó corriendo.
  • Está más sordo que una tapia.
  • Ni el ciego juzga de colores, ni el sordo de razones.
  • El deber me llama, pero me hago el sordo.
  • Si entras en la audiencia de los reyes, entra sordo y sal mudo.
  • El ciego desea ver, desea oír el sordo, el flaco desea ser gordo, y el gordo enflaquecer.
  • Ciego, sordo y mudo: el mejor marido.
  • Cuando el jefe manda hay mucho sordo.
  • Estar como el niño de Diego, que nació sordo, mudo y ciego.
  • Callemos, que el sordo escucha.
  • Nunca está el sordo más aislado, que cuando está acompañado.
  • A quien se hace el sordo, barreno gordo.
  • Sordas son gallinas en las vendimias.
  • El sordo escuchó cómo el mudo dijo que el ciego vio cómo un cojo corría más rápido que un tren.
  • Come Juan y ponte gordo, y si te hablan hazte el sordo.
  • El mejor matrimonio sería aquel que reuniese a una mujer ciega con un marido sordo.
  • Al buen sordo, pedo gordo.
  • Para hacerse oír a veces hay que cerrar la boca.
  • No hay más sordo, que quien no quiere oír.
  • El sordo no oye, pero bien que compone.
  • La ira vuelve sordo, y la desesperación, ciego.
  • Si me defines por mi sordera, nunca sabrás quién soy.
  • Los de Cabezarrubias, sordos, los de Hinojosas cegatos, unos oyen lo que quieren, los otros son visionarios.
  • A palabras locas, orejas sordas.
  • Comamos y bebamos, y pongámonos gordos; y luego, si nos llaman, hagámonos los sordos.
  • Come más que una lima sorda.
  • Es dar voces al lobo darlas en llamar al que se hace sordo.
  • Más sordo que orejas de mercader.
  • Come, duerme y engorda, y si te llamaren, hazte la sorda.
  • Mirar sin ver, es como oír sin escuchar.
  • Dámele bobo, dártele he sordo.
  • Sordas son gallinas en trilleras.
  • Oír como quien oye llover.
  • Pablo se casó en Segovia, ciego, sordomudo y manco, cómo sería la novia, cuando engañaron a Pablo.

Refranes y dichos de ciegos

  • El libro es un mudo que habla, un sordo que responde, un ciego que guía y un muerto que vive.
  • En el país de los ciegos el tuerto es el rey.
  • Por dinero canta el ciego y baila el perro.
  • Estar como el niño de Diego, que nació sordo, mudo y ciego.
  • Cuando un ciego guía a otro, acaban los dos cayendo al foso.
  • El hombre que desee estar tranquilo ha de ser sordo, ciego y mudo.
  • Soñaba el ciego que veía, y soñaba lo que quería.
  • El sordo escuchó cómo el mudo dijo que el ciego vio cómo un cojo corría más rápido que un tren.
  • Dale limosna, mujer, que no hay en la vida nada como la pena de ser ciego en Granada.
  • Ciego, sordo y mudo: el mejor marido.
  • Quien tiene amor tras cerro, tanto mira que se queda ciego.
  • Perfumes al catarro, bálsamo al pasmo, luz al ciego y ruiseñor al sordo, aprovechan poco.
  • Si quieres que el ciego cante, la gallina por delante.
  • A mudos y ciegos hace testigos el dinero.
  • A veces, hasta un cerdo ciego encuentra una bellota.
  • El ciego desea ver, desea oír el sordo, el flaco desea ser gordo, y el gordo enflaquecer.
  • El amor es ciego, pero el matrimonio le devuelve la vista.
  • El mejor matrimonio sería aquel que reuniese a una mujer ciega con un marido sordo.
  • No preguntes al ciego por el camino, ni al necio por consejo.
  • La ira vuelve sordo, y la desesperación, ciego.
  • Cuando viajes por el país de los ciegos, cierra por lo menos un ojo.
  • Ni el ciego juzga de colores, ni el sordo de razones.
  • El amor es ciego, pero el casamiento encuentra la cura.
  • Un mudo estaba cantando, y un sordo le estaba oyendo, y un ciego estaba mirando, y un cojo pasó corriendo.
  • La mujer del ciego ¿para quién se afeita?
  • Ciego es el hombre sin libros.
  • El ignorante y el ciego caminan a tiento.
  • Un caballo ciego siempre se asusta a sí mismo.
  • ¿Qué ve el ciego aunque se le ponga una lámpara en la mano?
  • En mujeres, ciegos y frailes, los mosquitos son elefantes.
  • Un pollo ciego a menudo encontrará una mazorca de maíz.
  • Niño con siete niñeras se queda ciego.
  • Pablo se casó en Segovia, ciego, sordomudo y manco, cómo sería la novia, cuando engañaron a Pablo.
  • El ciego con una copa de vino, ve chispas y centellas, y el cojo se pone a bailar la cueca.
  • La felicidad da la vista a un ciego.
  • Una luz sigue siendo una luz, aunque el ciego no pueda verla.
  • Amanecerá y veremos, dijo un ciego, y amaneció y no vio.
  • Cuando tengas un novio, no lo beses en el balcón: porque el amor es ciego pero los vecinos no.
  • El peor ciego es el que no quiere ver.
  • Quitáronlo a la tuerta, y diéronlo a la ciega.
  • La fortuna es ciega y no sabe con quién juega.
  • El amor es ciego, el matrimonio te abre los ojos, y el divorcio te pone gafas.
  • Incluso una gallina ciega a veces encuentra un grano.
  • El ignorante, al ciego es semejante.
  • Si el ciego guía al ciego, ambos van a peligro de caer en el hoyo.
  • Dar palos de ciego.
  • Al ciego no le aprovecha pintura, color, espejo ni figura.
  • En tierra de ciegos, el tuerto es rey.
  • El amor es ciego.
  • Un ciego lloraba un día porque verse en el espejo quería.
  • La mujer del ciego, ¿para quién se pinta?
  • Buena es Cuenca para ciegos, y Villalón para mantenellos.
  • Un ciego no puede guiar a otro ciego.
  • Como la fortuna es ciega y loca, dalo al primero que topa.
  • Por santa Lucía, achican las noches y agrandan los días; primero a tumbo de piojo; después a paso de gallina; y por Navidad los ciegos lo verán.
  • Los ojos no le sirven de nada a un cerebro ciego.
  • Por Navidad, los ciegos lo notarán. Por Reyes, los bueyes.
  • Los de Cabezarrubias, sordos, los de Hinojosas cegatos, unos oyen lo que quieren, los otros son visionarios.

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¿Qué es un refrán?

Un refrán es un frase de origen popular repetida tradicionalmente de forma invariable, en la cual se expresa un pensamiento moral, un consejo o una enseñanza, particularmente la que está estructurada en verso y rima en asonancia o consonancia.


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