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Autor: El café de la Historia

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✅ Dichos y refranes de Colombia ✅

El cerdo siempre busca el fango.
No hay peor esfuerzo que el que no se hace.
La verdad, aunque severa, es amiga verdadera.
En pelea de burros, el pagano es el arriero.
Ladrón que roba a ladrón, tiene mil años de perdón.
Gallina vieja hace buen caldo.
Lo cortés no quita lo valiente.
El que se coma la carne que se coma también el hueso.
Lo poquito agrada, lo mucho enfada.
En pleitos de hermanos, no metas las manos.
Lo que bien se aprende nunca se olvida.
No hay que buscar al ahogado rio arriba.
Cachetada en cuero ajeno no duele.
Lo que dejes para después, para después se queda.
No hay que buscarle mangas al chaleco.
El que se fue a la villa perdió su silla.
No hay que creer en brujas, pero que las hay, las hay.
El que mucho corre, pronto para.
No hay que ser caballo para saber de carreras.
El que se mete a redentor sale crucificado.
El consejo de la mujer es poco, y el que no lo toma es loco.
En tiempo de guerra, cualquier hoyo es trinchera.
De la esperanza vive el cautivo.
El diablo sabe más por viejo que por diablo.
A boda ni bautizo no vayas sin ser llamado.
El frío conoce al desnudo y el mosco al arremangado.
Cuando la pobreza entra por la puerta, el amor sale por la ventana.
El frío conoce al encuero y el sol al sin sombrero.
No importa que el de adelante corra con tal que de atrás no se quede.
Madre es la que cría, no la que pare.
A buen sueño, no hay mala cama.
El hombre propone la mujer dispone y el diablo sopla.
No importa que nazcan chatos con tal que puedan respirar.
Mal camino no conduce a buen sitio.
De la mano a la boca se pierde la sopa.
El infierno está lleno de buenas intenciones.
Más vale poco y bien ganado que mucho pero enfangado.
De la mar, el mero y de la tierra, el carnero.
El mal escribano le echa la culpa a la pluma.
De los arrepentidos se vale Dios.
Lo que no pasa en cien años pasa en un día.
Mas vale prevenir que lamentar.
El que se pica es porque ajos come.
El mico le dijo al mono. mira qué rabo tenés; y el mono le contestó. y el tuyo no te lo ves?
De los parientes y el sol, entre más lejos, mejor.
Lo último que se pierde es la esperanza.
Más vale estar sano que pagarle al cirujano.
No me hables de flores, que soy jardinero.
El muerto al hoyo y el vivo al pimpollo.
En tus apuros y afanes, acude a los refranes.
De noche todos los gatos son prietos.
El ocio es la madre de todos los vicios.
De sabio, poeta y loco, todos tenemos un poco.
No puedes tapar el cielo con la mano.
El peor de los males es tratar con animales.
Del agua mansa líbrame Dios que de la brava me libro yo.
El perfume fino viene en envase pequeño.
El pez grande se come al chiquito.
Del árbol caído todos hacen leña.
Más vale ser cabeza de ratón que cola de león.
El pez que busca anzuelo, busca su duelo.
Del dicho al hecho hay un gran trecho.
El pudor de la doncella la hace aparecer más bella.
Del plato a la boca se cae la sopa.
No se cazan dos pájaros al mismo tiempo.
Los cuernos y las canas no salen por la vejez.
El puerco más flaco se come la mejor mazorca.
Desde que se hicieron las excusas nadie queda mal.
Despacio voy, porque de prisa estoy.
Entre amigos honrados, cumplimientos dispensados.
El que siembra vientos cosecha tempestades.
Después de la tempestad viene la calma.
No se deben esperar peras de un olmo.
El que tiene nariz que no mande a oler.
Después de muerto no hay quien ronque.
El que tiene padrino se bautiza.
Después del relámpago viene el trueno.
El que tiene tienda que la atienda, o si no que la venda.
No se puede ensillar antes de traer las bestias.
Martes, ni te cases ni te embarques.
Más vale solo que mal acompañado.
El que vive de ilusiones muere de desengaños.
Dime con quien andas y te diré quién eres.
Gato escaldado, del agua fría huye.
El sueño es alimento de los pobres.
Dime cuánto traes y te diré cuánto vales.
El último en llegar, con la más fea le toca bailar.
El que a hierro mata a hierro muere.
Más vale un hoy que dos mañanas.
El valiente de palabras es muy ligero de pies.
Entre marido y mujer, nadie se debe meter.
Dinero sin caridad, es pobreza de verdad.

En boca cerrada no entra mosca.
No sufras por calenturas ajenas.
Más vale un mal arreglo que un buen pleito.
Dios dice ayúdate que yo te ayudaré.
No te quemes la boca por comer pronto la sopa.
En boca del mentiroso, lo cierto se hace dudoso.
El que a todos saluda, pronto rompe su cabeza.
No tires piedras al vecino si tu techo es de cristal.
Más vale un por si acaso que un lo pensaré.
Dios le da pan al que no tiene dientes.
El que al cielo escupe, en la cara le cae.
Nunca es tarde si la dicha es buena.
Dios le da barba al que no tiene barbilla.
El que bebe agua en tapara o se casa en tierra ajena, no sabe si el agua es clara ni si la mujer es buena.
Donde hubo fuego cenizas quedan.
El que canta por la mañana, llora por la tarde.
Donde manda capitán no manda marinero.
El que canta, sus males espanta.
Donde reina la mujer, el diablo es primer ministro.
El que con niños se acuesta, amanece mojado.
Dos bueyes machos no viven en una misma cueva.
El que da lo que tiene a pedir se queda.
Dos cabezas piensan más que una.
En casa de herrero azadón de palo.
Es mejor malo conocido que bueno por conocer.

Cuando las barbas de tu vecino veas cortar, pon las tuyas a remojar.
En casa de jabonero el que no cae resbala.
A burro negro, no le busque pelo blanco.
En el país de los ciegos el tuerto es rey.
Más viejo es el viento y aún sopla.
Cuando se enojan las comadres, se dicen las verdades.
En esta vida maluca si no hay pan se come yuca.
El que da primero da dos veces.
Grano a grano la gallina llena el buche.
En guerra avisada no muere gente.
Cada cual arrima la sardina a su brasa.
El que da y quita, con el diablo se desquita.
A chillidos de marrano, oídos de matarife.
En la boca del embustero lo cierto se hace dudoso.
El que de mañana se levanta, en su trabajo adelanta.
Cuando se está hundiendo el barco salen todas las ratas.
A juventud ociosa, vejez trabajosa.
El que es un buen gallo en cualquier corral canta.
Cuando uno está de malas, hasta los perros le ladran.
Favor publicado, favor deshonrado.
El que espera desespera.
El que guarda siempre encuentra.
El que calla otorga.
A la mejor cocinera, se le ahúma la olla.
Matrimonio y mortaja del cielo bajan.
En la puerta del horno, se quema el pan.
De golosos y tragones están llenos los panteones.
Cuando uno va de culo no hay barranca que lo ataje.
A la sombra de los buenos, viven los malos.
Vísteme despacio que voy de prisa.
Cuenta el milagro, pero no digas el santo.
A la tierra que fueres haz lo que vieres.
De dinero y bondad, siempre la mitad.
Vaca chiquita, siempre es ternera.
A las palabras sueltas se las lleva el viento.
Cada cual sabe dónde le aprieta el zapato.
A mula que otro amansase algún resabio le queda.
El que hambre tiene, en tortillas piensa.
Una sola golondrina no hace verano.
A quien Dios no le da hijos el diablo le da sobrinos.
Haz el bien y no mires a quién.
El que juega con fuego se quema.
Una manzana podrida daña el barril completo.
A veces el remedio es peor que la enfermedad.
El que juega por necesidad pierde por obligación.
A veces sale más caro el collar que el perro.
El que más hace, menos alcanza.
Febrero loco y marzo otro poco.
Una cosa piensa el burro y otra el que lo arrea.
Mientras el hacha va y viene descansa el palo.
Acabándose el dinero, se termina la amistad.
El que mucho abarca poco aprieta.
Agua por mayo, pan para todo el año.
Una buena acción es la mejor oración.
El que sale a bailar, pierde su lugar.
Agua que no has de beber, déjala correr.
Todo los días se tira un bobo a la calle.
Agua y mujer a nada deben oler.
Al buen entendedor pocas palabras.
Todo lo limpio es bonito, menos el bolsillo.
Al final, la cabra al monte tira.
Te conozco bacalao, aunque vengas disfrazao.
Cada cual se reparte con la cuchara grande.
Al hombre que camina no se le paran las moscas encima.
Barriga llena, corazón contento.
Tanto nadar para morir en la orilla.
Al mejor cazador se la va la liebre.
Hasta al mono más listo se le cae el zapote.
Cada uno en su casa es rey, pero su mujer hace la ley.

El ojo del amo engorda el caballo.
Si truena es porque va a llover.
Secretos en reunión es mala educación.
Al perdido solo le queda la lengua.
Si quieres el perro, acepta las pulgas.
Muchos cocineros dañan la comida.
Al perro más flaco se le pegan las pulgas.
Si quieres conocer a Andrés, vive con él un mes.
Buen buey no pisa mata, y si pisa no mata.
Se cazan más moscas con miel que con vinagre.
Si a viejo quieres llegar, las cargas has de soltar.
Al pobre y al feo, todo se le va en deseo.
Caras vemos, corazones no sabemos.
Al que Dios se lo da, San Pedro se lo bendiga.
Si a tu hijo no le das castigo, serás su peor enemigo.
Reunión de zorras, perdición de gallinas.
El que no lleva la carga le parece que no pesa.
Según es el pájaro así es el nido.
Al que no quiere caldo se le dan dos tazas.
Quien no arriesga nada, ni pierde ni gana.
Calma piojo que el peine llega.
Muchos hijos, riqueza del pobre.
Quien con el lobo se junta a aullar aprende.
Al vago y al pobre, todo les cuesta doble.
Muerto el capital, acabado el interés.
Algo tendrá el agua cuando la bendicen.
Quien bien te quiere te hará llorar.
Mujer, gallina y marrano se comen con la mano.
Caballo grande, ande o no ande.
Músico pagado adelantado no toca bien.
Quien bien quiere a Beltrán, bien quiere a su can.
Camarón que se duerme se lo lleva la corriente.
Nada puede dar quien nada tiene.
Amigo en la adversidad es un amigo de verdad.
Pueblo pequeño, infierno grande.
Nadie aprende por cabeza ajena.
Amigo es un peso en el bolsillo.
Primero mis dientes que mis parientes.
Carne que se lleva el gato no vuelve al plato.
Hay que arar con los bueyes que se tenga.
Amigos y libros, pocos y buenos.
Predicar en desierto es como aconsejar a un muerto.
Nadie sabe lo que hay en la olla más que quien la mueve.
Come y bebe, que la vida es breve.
Hijo sin dolor, madre sin amor.
Por quererla adornar, la vinimos a estropear.
Amor de lejos, amor de pendejos.
Con amigos así no hacen falta enemigos.
Animales ingratos las mujeres y los gatos.
Por las vísperas se sacan los días de fiesta.
Ni mano en plata, ni ojo en carta.
Con amor y aguardiente, nada se siente.
No cantes victoria antes de tiempo.
Por el árbol se conoce el fruto.
Antes que acabes, no te alabes.
Con el ojo afuera no hay Santa Lucia que valga.
El que mucho fía, se queda con la bolsa vacía.
Por donde pasa la aguja, pasa el hilo.
Antes que te cases, mira lo que haces.
Hijos crecidos, trabajos llovidos.
Con la vara que midas serás medido.
Poquito a poco hila la vieja el copo.
El que mucho habla, mucho erra.
Honra y dinero no caminan por el mismo sendero.
No cortes el árbol que te da sombra.
Persona precavida vale por dos.
El que no espera vencer ya está vencido.
No crea que el indio es pobre porque la maleta es de hojas
Antes mis dientes que mis parientes.
Perro que no camina, no encuentra hueso.
El que no oye consejo, no llega a viejo.
No cruces el puente antes de llegar a él.
El que nació para toro del cielo le caen los cuernos.
El que no se arriesga no cruza el río.
Pasado el tranco, olvidado el santo.

✅ Más dichos colombianos ✅

Con virtud y bondad se adquiere autoridad.
El que no tiene para más, con su mujer se acuesta.
No es lo mismo llamar al diablo que verlo venir.
Para muestra con un botón basta.
Honra y dinero se ganan despacio y se pierden ligero.
El que parte y reparte siempre coge la mejor parte.
Antioqueño que se respete pide rebaja.
No es más rico el que más tiene, sino el que menos necesita.
El que poco habla, mucho dice.
Para gustos, colores.
No hagas hoy a nadie lo que no quisieras que te hicieran a ti mañana.
El que por su gusto corre, nunca se cansa.
Conoces al viajero por sus maletas.
El que quiera marrones que aguante tirones.
Para dos que se quieren bien, con uno que coma basta.
No hay cuña que apriete tanto que la del mismo palo
El que quiere baile, que pague músico.
Antioqueño tiñe, pero no destiñe.
El que quiera pescado que se moje los pies.
Para cuchillo que corta, no hay carne dura.
Cuando hay hambre, no hay pan duro.
La envidia es una mala consejera.
Paga lo que debes y sabrás lo que tienes.
Aprende bien a callar, para que sepas hablar bien.
No hay curva mala pasándola despacio.
Ojos que no ven corazón que no siente.
La juventud del viejo está en el bolsillo.
El que quita la ocasión, evita el ladrón.
La mona, aunque se vista de seda, mona se queda.
Aquellos son ricos que tienen amigos.
Oír, ver y callar, para en paz estar.
La mujer y la guitarra para tocarlas hay que templarlas.
Árbol que crece torcido nunca su tronco endereza.
La suerte de la fea la bonita la desea.
No hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista.
El que ríe de último, ríe mejor.
Obra con amores y no con buenas razones.
Arrieros somos y en el camino nos encontraremos.

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REFRANES AMERICANOS, REFRANES SUDAMERICANOS

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✅ ¿Qué es un refrán?

Un refrán es un frase de origen popular repetida tradicionalmente de forma invariable, en la cual se expresa un pensamiento moral, un consejo o una enseñanza, particularmente la que está estructurada en verso y rima en asonancia o consonancia.